Salvajes
de piel morena
y torso desnudo,
finas esculturas
de cuero.
Jóvenes apaches
sin pinturas de guerra,
estoicos,
orgullosos,
frente a la arena
y el mar
de su universo.
Les roban
la sonrisa
a las chicas
italianas.
Isla de Comino,
playa de Siracusa,
duermen la siesta
en una tacita de plata.
Flamencos
de ida y vuelta,
son como las aves
migratorias.
Llévatelos de la mano
y acogelos en casa,
pero si no tienes jaula,
escaparan
para volver
entre las olas.
Jóvenes salvajes de Cádiz
siempre viviendo a deshoras.